Etiopía

Bahardar, la ciudad etíope que más se proyecta hacia el futuro, se encuentra en la cabecera del Nilo Azul, junto al lago Tana. Las islas y las orillas del lago Tana se encuentran salpicadas con numerosos monasterios, la mayoría de ellos construidos en los siglos XVII y XVIII, sobre bases anteriores.

Gondar, la antigua capital imperial, a los pies de las montañas Simien, a una altura de 2.200m, es conocida por la gran cantidad de castillos medievales y la bellísima y cuidada decoración de sus iglesias.

Lalibela, una pequeña ciudad rodeada de montañas en las que se encuentran las mundialmente famosas 11 iglesias del siglo XIII,  literalmente escarbadas en la roca.

Axum es conocida por sus obeliscos y estelas y por albergar la iglesia de St. Mary de Zion, la más antigua de todas las iglesias del país.

Harar, ciudad amurallada, ciudad de mezquitas, minaretes y mercados, centro de las enseñanzas del Islam.

Y el rico Sur, en el que encontramos una variada vida animal, con numerosas aves endémicas en Arba Minch, la región del Valle del río Omo, que alberga los más hermosos paisajes, planicies, savana y lagos como los de Chamo o Abaya, a los pies de la gran cordillera del valle del Rift o los parques Nacionales como el de Nech Sar entre otros.

Y no podemos olvidar en esta región la gran variedad étnica que en ella habita, grupos nómadas o semi-nómadas entre los que se encuentran los Hamer, los Mursi, los Karo, Benna, Geleb, Surma, Dassanech y Arrhi, entre otros. Un país desconocido, de gran riqueza cultural, esencia en religión y aún anclado en el tiempo.