Tanzania

Tanzania es uno de los enclaves en el que se han encontrado restos arqueológicos que aportan datos a las distintas hipótesis acerca del origen del hombre. Sus amplios territorios y sus abiertas y extensas llanuras, albergan de las mayores poblaciones de fauna salvaje del mundo: ñus, monos, antílopes, leones, leopardos, cocodrilos y una larga lista que en ocasiones ha conocido la despiadada mano de los cazadores furtivos.

El territorio tanzano alberga grandes parques y reservas naturales como el Serengueti, importante por la gran concentración de herbívoros y por sus movimientos migratorios anuales, altas cumbres como el Kilimanjaro, la gran caldera volcánica conocida como cráter del Ngorongoro y las gargantas de Olduvai. El lago salado Natron, junto a la frontera con Kenya, el P.N del Lago Manyara, en el que se alternan, un área de bosque tropical, una zona de sabana, otra de matorral y por último una de pastizales.  El P.N del Taranguire en la amplia meseta Masai, y ya más hacia el sur se encuentran el parque nacional de Ruaha, o la reserva de Selous.

También pertenecen al territorio tanzano, las atractivas islas de Zanzíbar y Pemba (que forma parte del archipiélago) y la Isla de Mafia frente a la desembocadura del río Rufiji. Gran parte de la barrera de corales que rodea sus costas está protegida por el Parque Marino de la Isla de Mafia. La vegetación típica de Tanzania está compuesta en gran parte por la sabana, pastos o arbustos y los árboles autóctonos son la acacia o el baobab. En las islas sobre todo hay una curiosa mezcla de costumbres africanas, árabes, europeas o indias.